Muchas personas acuden a la farmacia preocupadas por la caída del cabello estacional o genética o por el exceso de grasa y/o aparición de caspa. También hay quien pide consejo farmacéutico porque presenta una pérdida de grosor o el cabello ya no está tan brillante y sedoso. Con frecuencia estos problemas están relacionados con que no se realiza del todo bien el proceso de lavado del cabello.
Importancia del correcto lavado del cabello
El lavado es una acción que , como es tan habitual se hace sin pensar. Sin embargo, el lavado y el acondicionado del cabello son dos pasos fundamentales para conseguir que nuestro cabello esté sano.
La salud, vitalidad y brillo del cabello depende de la correcta aplicación del champú y acondicionador. Con un correcto lavado se consigue mejorar la salud del cabello y del cuero cabelludo, que va a repercutir en un aumento de brillo, soltura y manejabilidad de nuestro pelo y también lo prepara para el trabajo posterior (secado, peinado, …).
El cuero cabelludo es una de las partes más importantes, a pesar de que muchas personas lo desconocen. Es muy importante lavarlo y mantenerlo limpio ya que, es la base para que el cabello crezca fuerte y bonito. Cuando el cuero cabelludo es seco, graso, sensible o está irritado es fundamental el uso de un champú específico. El pilar para que un cabello crezca fuerte y sano es un cuero cabelludo limpio.
Pasos para un correcto lavado del cabello
- Antes del lavado se debe desenredar bien el cabello con un peine de púas anchas, porque si se hace cuando ya está mojado se rompe con más facilidad. Además, se activa la circulación y ayuda a la exfoliación del cuero cabelludo.
- Se debe empapar bien el cabello con agua que debe estar entre 37 y 39 grados centígrados.
- No se debe aplicar el champú directamente en el cabello, sino primero en la palma de la mano la cantidad para luego, repartirlo por todo el cabello.
- Con la yema de los dedos se masajea el cuero cabelludo despegándolo del cráneo. Al hacer esto, se activa la microcirculación. Este acto es muy bueno para prevenir la caída del cabello y favorecer el efecto del tratamiento aplicado. El masaje debe durar unos tres minutos.
- Lavar con suavidad y sin frotar el cuero cabelludo y la raíz del pelo, mientras que el resto se limpia con la espuma que va cayendo de medios a puntas.
- Aclarar con agua hasta eliminar totalmente la espuma del champú.
- Aplicar el acondicionador o mascarilla y dejar actuar.
- El último enjuague del cabello debe ser con agua fría, para que las escamas que forman el pelo se cierren, esto hace que aparezca más brillante.
- Envolver con una toalla de algodón y no frotar.
- Para el uso de planchas y secadores se debe aplicar antes un protector térmico para evitar el daño producido por el calor.
Hay distintos tipos de champú según la necesidad
- Para el cuero cabelludo seco hay que elegir un champús suaves e hidratantes. No utilizar en exceso el secador ni productos astringentes.
- En el cuero cabelludo graso, los productos más adecuados son aquellos con propiedades antifúngicas y antisépticas con activos como el zinc, la curbicia y la melaleuca.
- En el cuero cabelludo sensible se recomienda champús calmantes que contengan menta, eucalipto o aceite de macadamia.
- Si el cabello es seco, los mejores champús son los que aportan nutrición, como la manteca de karité.
- En el cabello coloreado se recomienda utilizar productos sin sulfatos para evitar que se pierda.
- En el cabello gris, blanco o rubio platino el champú debe contener pigmentos morados.
- Si el cabello es fino hay que evitar las siliconas pues le dan más peso y lo aplasta.
- Si el cabello es rizado, es primordial una buena hidratación y nutrición para evitar el encrespamiento y para conseguir unos rizos definidos y sedosos.
Mitos y falsas creencias
Frotar el cabello al lavarlo
Frotar mucho el cabello hace que se abra la cutícula y, por tanto, se encrespe. En la primera jabonada se masajea el cuero cabelludo para que quede bien limpio y, en la segunda, se aprovecha para limpiar el cabello dejando que caiga la espuma por el pelo frotando suavemente con las manos.
Otra cosa que se hace mal con frecuencia es frotar el cabello cuando se seca con una toalla, sino que, se debe secar con suavidad.
Lavado del cabello graso demasiado frecuente
Otro mito muy común es que si se lava con regularidad el pelo graso hace que se engrase más. No es cierto, la grasa asfixia el folículo y se ensucia más. Por eso, hay que lavarlo cada vez que se note sucio con productos específicos
Lavado del cabello seco o cuero cabelludo seco
En el cabello seco o cuero cabelludo seco ocurre todo lo contrario. Si se lava mucho hace que se pierda la capa lipídica (necesaria) del cuero cabelludo. En este caso se recomienda limitar los días de lavado a cuando sea necesario y usar una línea específica.
